Incomunicados

un mundo en red

A día de hoy pensamos que la Nuevas Tecnologías lo han invadido todo, que es como una ola que ha surgido en el último segundo arrasando con todo. Pero por impensable que sea, aún hay pequeños lugares donde no hay cobertura, donde hay gente que no puede llamar a los bomberos, o tener un acceso rápido a un centro sanitario, donde los caminos aún son de arena y no de alquitrán. 

Creeréis que esto solo sucede en los países subdesarrollados, pero os equivocáis esto pasa aquí, en España, en aldeas de muy pocos habitantes o en casas de campo cercanas a algunas carreteras. Y la pregunta es ¿quién vive ahí? Por extraño que parezca suelen ser personas mayores que se niegan a abandonar una vida junto a unos recuerdos y a la naturaleza que siempre les ha acompañado, aquellos que más necesitan de las ventajas de las Tic, ya que su salud es la que corre más riesgo. Sin embargo, no podemos obligarlos que a sus años se aventuren a este mundo que nos ha invadido sin pedirles permiso. 

Hay que ser conscientes de que la inmensa mayoría de estos ciudadanos son analfabetos y que si antes de este boom tecnológico les costaba trabajo arreglar sus problemas, ahora tenemos éste añadido.

Sin embargo, el Trabajo Social media entre estas dos mentalidades que conviven en una misma era. De este modo intento responder a la frecuente pregunta que surge del murmullo de las clases de 1º de Trabajo Social: ¿para qué sirve la asignatura de Nuevas Tecnologías y Gestión de la información?

Si hay personas que no están en el mundo cambiante, qué menos que nosotros como profesionales seamos capaces de ayudarlos con sus problemas.