Muy buenas queridos lectores, se acerca el final del curso y por tanto, no me queda otra que deciros adiós.
Sin embargo, no me quiero ir sin contaros como ha sido mi experiencia en esta herramienta que nos ofrece la ventana virtual. Pues aunque, al principio puede parecer un instrumento complejo, confieso que me ha acabado encantando, creo que es una herramienta genial de reflexión que nos permite comentarle al mundo lo que pensamos, impidiendo así que las palabras se las lleve el viento.
Por tanto aunque esta historia acabe aquí, estoy segura de que nos volveremos a ver. HASTA SIEMPRE.
Por tanto aunque esta historia acabe aquí, estoy segura de que nos volveremos a ver. HASTA SIEMPRE.
Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.
Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.
Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.
Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.
